Favorecer y atender el nacimiento, estimulación, detección, fortalecimiento, transformación y trascendencia de la SABIDURIA en los niños, adolescentes y jóvenes es tan relevante como el desarrollo e investigación de la creatividad, talento e inteligencia CTI. Es una oportunidad para padres de familia, docentes o cuidadores.

 
Poco se habla del cómo atender y desarrollar más y mejor la sabiduría en los niños, entonces ¿por qué extrañarnos de no encontrar adultos sabios?

La sabiduría no necesariamente es un enigma en las profundidades de oriente ni tampoco una búsqueda propia de los griegos. La sabiduría hace parte de la esencia y sentido ontológico del Ser al Hacer y al Hacer Ser. La sabiduría es civilización de la felicidad.

¿Pero cómo lograr tal propósito o cómo saber si hace parte de las cualidades humanas presentes? Comprender esta pregunta ya es un sabio paso hacia una parte de la respuesta.

Podría listarse varias estrategias o herramientas que faciliten tan magno y generoso deseo y crear un kit o cajita mágica. Todo es posible, y para algunas personas quizás sólo es cuestión de niveles de consciencia, para otras colmarse de consejos. Luego, cada "kit" es diferente cuando la atención es personalizada. 

Sabiduría. Amiga íntima. Amiga cercana. Cerca amiga íntima, sabia.

Sea este año 2013 un contenedor de motivaciones y emociones positivas, trascendentes, y por supuesto, un esparcidor o transferente de las mismas.

 
Favorecer y atender el nacimiento, estimulación, detección, fortalecimiento, transformación y trascendencia de la SABIDURIA en los niños, adolescentes y jóvenes es tan relevante como el desarrollo e investigación de la creatividad, talento e inteligencia CTI. Es una oportunidad para padres de familia, docentes o cuidadores.

 
Poco se habla del cómo atender y desarrollar más y mejor la sabiduría en los niños, entonces ¿por qué extrañarnos de no encontrar adultos sabios?

La sabiduría no necesariamente es un enigma en las profundidades de oriente ni tampoco una búsqueda propia de los griegos. La sabiduría hace parte de la esencia y sentido ontológico del Ser al Hacer y al Hacer Ser. La sabiduría es civilización de la felicidad.

¿Pero cómo lograr tal propósito o cómo saber si hace parte de las cualidades humanas presentes? Comprender esta pregunta ya es un sabio paso hacia una parte de la respuesta.

Podría listarse varias estrategias o herramientas que faciliten tan magno y generoso deseo y crear un kit o cajita mágica. Todo es posible, y para algunas personas quizás sólo es cuestión de niveles de consciencia, para otras colmarse de consejos. Luego, cada "kit" es diferente cuando la atención es personalizada. 

Sí, la consciencia juega un rol poderoso hacia la sabiduría. La consciencia es prima hermana de la imaginación y sobrina del conocimiento; incluso otros de sus parientes son el pensamiento y el reconocimiento. Su abuelo el recuerdo y su abuela la visualización. Darnos cuenta del gran árbol que la genera y contiene, esparce y eleva, implica arte para pensar, sentir y actuar consecuentemente, responsables de las cosas y los sujetos, del cosmos, del sí mismo.

La sabiduría hace parte de las cualidades y facultades humanas mientras se perciba y vivan activos los sentidos conocidos, y aquellos suprasensibles; ella es mística, es sagrada, es alegría creativa y creadora, sanadora. Es madre, es fémina. 

Respirar, amar, alimentarnos, soñar, colorear, pintar, intuir, pensar, crear, etc. son algunas de las herramientas emergentes y básicas percibidas por uno de los estados de consciencia: sobrevivir, experimentar, relacionarnos, servir.

Luego, la música y sus derivadas más sutiles son un poderoso conector y sanador de memorias dolorosas y ancestrales, sin por ello descuidar el silencio y sus matices armónicas que activan sonidos curativos para el cuerpo y el alma.

!Cuánta paz nos falta por rescatar de la neurobiología y fisiopatología humana! Seguimos preguntándonos ¿por qué somos como somos? Y seguimos siendo víctimas de la crueldad humana. Observadores de una geografía corporal que algunos seres con su arte descriptivo han sabido navegar con una frase corta y inteligible por otras miradas u observadores que leen “el cuerpo grita lo que la boca calla”; y que decir del mapamundi, del croquis, del planeta con una ecología contaminada.

Sí, es cierto lo que te preguntas o afirmas, en efecto hay más cosas feas que malas. Entonces, ¡la sabiduría integra tantas formas y fondos capaces de ir más allá de las palabras; ella detecta, repara, sana tantos fantasmas!.

¿Cuáles son tus fantasmas?, esos que te detienen o congelan en la intoxicación extraña, en el vacío profundo. Un fantasma es aquel que no suele traer para nada la calma y menos contemplar y vivir la divinidad en cada Ser incorporada; más sencillo aún: fantasmas habitando en tu morada, vibrando al ritmo que tú les mandas.

Permítete conocerte, escucha el susurro de aquella divinidad que todavía te ama. Si solo no puedes o no lo entiendes, siempre hay alguien que facilitará o querrá aprender, explorar y expedicionar cerca, al lado, en lo profundo, arriba y abajo de tu alma. Sabiduría y felicidad son hermanas. Decide ser pariente. Ellas resuenan y repercuten para el bien-estar de tus cuerpos, favorecen la misión que experimenta el alma.

© Luna Isys Huayra